Ahí os dejo la visión que Claudio Naranjo esboza en referencia al Héroe. Me parece interesante más que nada su descripción del verdadero dragón y su relación íntima con nuestro ser.
» En términos mitológicos, la difícil situación en que se encuentra el héroe antes de su aventura, podría ser entendida como un empobrecimiento de personalidad autoimpuesto aunque desconocido. Con respecto sólo a un fragmento de su personalidad como YO, y excluyendo de su conciencia el resto, el héroe se siente vacío. la suya es una condición de anulación, en el sentido de que esta manteniendo una distancia entre su ego y todo aquello de su personalidad que podría amenazar la imagen que tiene de sí mismo. Implícita en la frontera de su ego está la idea de que cualquier cosa que no sea su personalidad consciente, es el MAL, y en cierto modo cree que si renunciase a sus mecanismos de defensa, se abriría como una caja de Pandora. Pero conscientemente se siente incompleto, y proyecta en un paraje remoto todo lo que ha exorcizado de su consciencia. Es allí donde se ocultan el monstruo y la promesa de una vida más intensa…
…Al matar al dragón, el héroe ha matado también su personalidad HEROICA -compuesta de desconfianza, avaricia e ira- y ha asimilado esas cualidades de modo que resultan transformadas . El rechazar el dragón que llevaba dentro fue precisamente lo que lo convirtió en un dragón, un guardián de la frontera, acaparando los tesoros de la vida. Una vez que el héroe suprime su agresión de modo que en vez de rechazar ansiosamente al dragón (y preservar así la frontera de su ego), arriesga su vida en la aventura, es él quien se convierte en una especie de dragón, pues sólo un dragón puede combatir a otro dragón . Pero, habiendo desaparecido su enemigo -ahora que ha encontrado la vida en sí mismo- ya no necesita la agresión. Ha superado la ira rindiéndose a ella, y viviéndola en conexión con su verdadero propósito .
Aquí podemos ver por qué la leyenda del héroe no puede ser sino mítica; el verdadero blanco de la ira en el hombre no puede ser otro que la prisión que éste ha construido para sí mismo en su imaginación, y no se encuentra en el mundo real. Y es en las ruinas de esa prisión donde puede encontrar la PIEDRA FILOSOFAL que deseaba: sus propias energías no utilizadas y desviadas »